lunes, 8 de mayo de 2017

Conozca la vida del Ninja Boliviano

El Alto, 8 de mayo.- Un apasionado por la práctica de la lucha libre y seguidor de Mao Tse Tung, así se define Emeterio Cori Quisbert, más conocido en el cuadrilátero como el “Ninja Boliviano”, quien lleva una década como instructor de este deporte para las nuevas generaciones.

Emeterio Cori Quisbert se declara más que admirador del líder chino Mao Tse Tung, afirma que su religión ahora es maoísta. El luchador de 1,60mts puede levantar 65 kilos en pesas y lleva 27 años en esta disciplina que está muy enraizada en la ciudad de El Alto.

Desde muy niño le fascinaba ver las películas de Artes Marciales y de Taekwondo, tenía como ídolo a Bruce Lee. Antes de cumplir su servicio militar plasmó sus sueños y ganó el cinturón en esa disciplina.

El Ninja Boliviano empezó a luchar desde sus 15 años, sus primeros personajes fueron Black Panter, Águila Tapatía, pero tuvo que revelarse ante su madre, pues su progenitora no le daba autorización para que luchara.

Su mejor pareja en el cuadrilátero es Sombra Junior, sus rivales más exigentes Histeria y Vampiro. Ninja Boliviano sueña algún día enfrentarse encima del ring al mexicano Rey Mysterio a quien está dispuesto a superar por su agilidad. Se declara fiel admirador del Santo mexicano.

Durante varios años peleó en los grupos de Líder, Titanes del Ring, Lucha Fuerte Extrema y actualmente en Reto de Titanes de la zona ferropetrol de El Alto. Afirma ser un luchador independiente. El Matemático fue su primer entrenador, Kung Fu boliviano, Sombra Vengadora y Ángel Azul, sus mentores.

Al margen de luchar, cada fin de semana juega fútbol de salón. Su corazón le pertenece a Bolívar de Tembladerani y Real Madrid de España. Muy joven estudió el manejo de Máquinas Electrónicas Textiles, en la Escuela Industrial Pedro Domingo Murillo e INFOCAL.

Haber brillado en la televisión boliviana, Lucha de Campeones, Titanes del Ring, Estrellas del Ring, fueron sus mayores logros como luchador. Mientras, sus momentos difíciles fueron cuando los hermanos tétricos Fito y Fiño Jordy, le rompieron una silla plástica en la cabeza, provocándole 30 puntadas que le obligaron a dejar la lucha libre durante ocho meses.

Su árbitro favorito fue Jimmy Rubiloza, de los Titanes del Ring del Olimpic Ring de San Pedro. Locutor preferido, Juan Astorga, conocido como “Doctor Salsa”. Recuerda con los ojos llorosos haber entrenado un año y cuatro meses para subir al cuadrilátero por primera vez con el pseudónimo de Black Panter, evento llevado adelante en el coliseo municipal en la década de los ochenta.

Sobre el fenómeno de las “Cholitas luchadoras”, el Ninja Boliviano afirma que ellas se han convertido en un atractivo para los turistas extranjeros que llegan a La Paz.

“Las cholitas luchadoras están en su auge, el extranjero delira con las polleras de las mujeres aymaras”, afirmó.

Texto y fotos: Alberto Medrano
Fuente: Visor Bolivia



domingo, 7 de mayo de 2017

Ninja boliviano en el periódico El Alteño

La nota periodística del Ninja boliviano salió publicado el domingo 7 de mayo en el periódico El Alteño.




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